Universidad Católica Boliviana "San Pablo"

Universidad Católica Boliviana “San Pablo” Capítulo II: Marco Teórico Diego Antezana Zbinden 25 El proceso de evaluación de las consecuencias también cambia el énfasis de la idea de que toda falla es negativa y debe ser prevenida. De esta manera focaliza la atención sobre las actividades de mantenimiento que tienen el mayor efecto sobre el desempeño de la organización y resta importancia a aquellas que tienen escasos resultados. También nos alienta a pensar de una manera más amplia acerca de diferentes maneras de manejar las fallas, más que concentrarnos en prevenir fallas. Las técnicas de manejo de fallas se dividen en dos categorías:  Tareas Proactivas: estas tareas se emprenden antes de que ocurra la falla, para prevenir que el ítem llegue al estado de falla. Abarcan lo que se conoce tradicionalmente como mantenimiento “preventivo” o “predictivo”, aunque se verá luego que el RCMII utiliza los términos reacondicionamiento cíclico, sustitución cíclica y mantenimiento a condición.  Acciones A Falta De: estas tratan directamente con el estado de falla y son elegidas cuando no es posible identificar una tarea proactiva efectiva. Las acciones a falta de incluyen búsqueda de falla, rediseño y mantenimientoa rotura. 2.2.3.7. Tareas Proactivas Mucha gente todavía cree que la mejor manera de optimizar la disponibilidad de la planta es hacer algún tipo de mantenimiento proactivo de rutina. El pensamiento de la Segunda Generación sugiere grandes reparaciones, o reposición de componentes intervalos fijos. La Figura2.2 muestra la perspectiva de la falla a intervalos regulares. Figura 2. 2 Falla por Desgaste Fuente: http://confiabilidad.net/articulos/mantenimiento-el-nuevo-paradigma/

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