Universidad Católica Boliviana "San Pablo"

126 Una vivienda fue robada por un delincuente que aprovechó la ausencia de los propietarios para romper un vidrio de una ventana e ingresar. Una vez dentro, revolvió cajones y muebles y dejó a su paso huellas de pisadas y papiloscópicas. A su regreso, la dueña de casa trata de no tocar nada y avisa del hecho a la seccional policial correspondiente. Como en ese momento el oficial de guardia tomaba intervención en otro hecho, éste envía un agente a verificar lo que había ocurrido. Luego de interrogar brevemente a la señora, el policía efectúa una verificación del lugar por donde accedió el delincuente y apoya distraídamente sus codos en el friso de la ventana, dejando sus huellas y destruyendo las del autor; dentro de la vivienda, además, el agente abre y cierra puertas de muebles y placares, etc. En síntesis, cuando llega el experto criminalístico, es poco lo que éste puede hacer en la búsqueda y rescate de rastros papilares, pues si alguno dejó el delincuente, ya sus camaradas se encargaron de destruirlo total o parcialmente. (ZAJACZKOWSKI: 1998, 15) …habiendo denunciado los familiares la desaparición de una pareja de jóvenes (varón y mujer), se comenzó a investigar el hecho. Al cabo de varias horas es hallado el vehículo de la pareja. El personal policial de la Brigada de Investigaciones, sin esperar la llegada de los profesionales criminalísticos, ingresa dentro del mismo, tocando y alterando las evidencias dejadas por los autores del hecho en el rodado. Luego aparecen los cadáveres de ambos jóvenes en un descampado, descubiertos por personal policial a las 8,30 horas cuando llegan a curiosear toda la plana mayor policial y todo el personal que colaboraba e la investigación. Recién a las 12,30 horas se da aviso a los profesionales criminalísticos. Si bien los cuerpos no habían sido tocados, las demás evidencias (rastros de pisadas, colillas de cigarrillos, etc.) se habían destruido o confundido con las huellas impresas en el lugar por el personal policial y con los cigarrillos fumados por éste. Finalmente, el hecho es esclarecido por la intervención del personal técnico de Criminalística, pues en la planta de los pies de los sospechosos detenidos se hallaron restos de sangre debido a una higiene desportillada realizada por uno de los sospechosos, quien, al ser extraída una muestra para enviarla a análisis, se apresuró a confesar su intervención en el hecho. A partir de ello se esclarecieron aproximadamente diez hechos más, incluidos varios homicidios. (ZAJACZKOWSKI: 1998, 15)

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