Universidad Católica Boliviana "San Pablo"

11 estaba destinada a sacerdotes y religiosos, y respondía a las ideas de redención, caridad y fraternidad de la Iglesia, dando al internamiento un sentido de penitencia y meditación. Recluían a los infractores en un ala del monasterio para que por medio de la oración lograsen su corrección. A partir del siglo XI, era muy característico leer y publicar las sentencias en actos públicos. La Inquisición 4 fue el primer Tribunal en Europa en abolir el tormento y los instrumentos designados a agravar la pena; sus calabozos fueron los más amplios, alumbrados e higiénicos, y el trato a los presos el más favorable. Se describen estos lugares como ―cuartos cuadrados, bien blancos, claros por medio de una ventana con reja: todas las mañanas se abren las puertas desde las seis hasta las once, a fin de que entre el aire y se purifiquen‖. Los prisioneros, tengan bienes o no, son tratados muy bien, pues les dan tres comidas. A los presos se les daba cama, ropa limpia, silla, mesa, algunos libros devotos y un alimento decente. En esta época también se quejaban del hacinamiento y por ello, la inquisición permitió que los presos cumpliesen la prisión en sus casas. En otras épocas de la Edad Media, como en la Alta Edad Media española, destacaron los Fueros 5 Municipales, Fuero Juzgo y Fuero Viejo de Castilla, los cuales reflejan que existió la prisión preventiva y la prisión por deudas (…) para los hombres ricos o de buena fama, se preveía la sujeción con hierros sin encarcelamiento. c) Edad Moderna En esta época las cárceles eran consideradas como espacios ajenos al Derecho. Los prisioneros eran forzados a trabajar para la Corona en los barcos y en el Nuevo Mundo para cubrir la demanda de mano de obra en el Imperio. Con respecto a España, en los siglos XVI– XVII aparecieron distintas Instituciones de Patronato, es decir, de asistencia social y tutelar a presos, liberados o menores descarriados. Las prisiones que se utilizaban para las mujeres eran las galeras, en ellas se internaban las prostitutas, vagabundas, mendigas, alcahuetas y las de mala vida. En estos centros se perseguía el escarmiento más que la corrección, aplicándose los métodos de la marca y la horca para las reincidentes. Por otro lado, las galeras, eran una de las penas caracterizadas por ser lugares de desolación y sufrimiento físico y psíquico donde no se permitía la pereza, la fatiga, el agotamiento ni la enfermedad. Lo más habitual era condenar a galeras a los delincuentes y esclavizar a los prisioneros de guerra. Se puede decir que las galeras representan un antecedente claro de los trabajos forzados de los presos, trabajo que no estaba remunerado económicamente. Es en este siglo XVI cuando comienzan a aparecer casos en los que las prisiones y su régimen se humanizan. El trabajo era muy diverso: así, en Holanda, los condenados raspaban palo Campeche (tipo de madera) y las mujeres trabajaban como hilanderas. Las primeras casas de corrección datan de los siglos XVI y XVII, eran centros destinados a la reclusión de mujeres, de manera que observamos una clasificación de los centros en base al sexo, y aparecen en Inglaterra, Holanda, Alemania y Suiza. Se menciona como la más antigua la House of Correction, ubicada en Bridewell (Londres), inaugurada en 1552. (…) en el año 1697, nació como consecuencia de la unión de varias parroquias de Bristol, la primera Workhouse de Inglaterra; otra se estableció en 1703 en Worcester; y una tercera lo hizo el mismo año en Dublín, pudiendo considerar a estas casas de corrección como el verdadero antecedente de la reacción carcelaria moderna, lo más significativo era el castigo que se infligía para imponer la disciplina que era rígida e inflexible. 4 La Inquisición se caracterizó por imponer penas como prisiones preventivas (llamadas cárceles secretas basadas en el tormento), la pena de muerte por fuego, la cárcel perpetua y la cárcel temporal. 5 Compilación de leyes. (RAE, 2001)