Universidad Católica Boliviana "San Pablo"

21 más oscuros e inaccesibles de los edificios de gobiernos e iglesias (construidos en los siglos I y X d. C). Algunos de estos lugares aún se usan como cárceles” (Plazola, s/f, p.445). Los espacios carcelarios no requerían de planos ni proyecto. El trabajo del arquitecto estaba limitado al espacio artístico; los únicos motivos para consultarlos eran su buen gusto y conocimiento de estética, que no eran necesarios para resolver las necesidades del sitio carcelario. Como ya se mencionó, el método común de corrección penal utilizado durante la Edad Media era el castigo físico y la muerte del ofensor, muchas veces en el lugar del delito cometido y a la vista de la gente. Las cárceles no tenían características arquitectónicas penitenciarias, en realidad se trataba de prisiones de castigo, como mazmorras, calabozos, sótanos o leprosorios localizados en los castillos y palacios medievales. (Plazola, s/f, p.445) Posteriormente, con la influencia del cristianismo, empezaron a funcionar algunos edificios en los que aún no existía la idea de qué elementos deberían constituir un centro penitenciario, pero sin desechar la idea de crear cierto temor hacia la población para que se abstuviera de cometer un delito o someterse a las imposiciones de los gobernantes. No se descartaba la idea de que las cárceles fueran lugares de torturas y muerte para que escarmentaran los futuros delincuentes. Desde mediados del siglo XV había quedado determinado como método arquitectónico la planta de cruz griega que se generalizó en estas edificaciones y fue usada excesivamente. En estos edificios con planta de cruz griega el centro desempeñaba un papel estrictamente simbólico y en él se situaba el altar y diversos elementos de carácter religioso (Fraile, 2016). Figura 03: Ospedale Maggiore de Milán Fuente: Pérez Pedro, Fraile, 2016 Figura 04: Casa de Corrección de Jóvenes Fuente: Pérez Pedro, Fraile, 2016