Universidad Católica Boliviana "San Pablo"
10 INTRODUCCIÓN El movimiento moderno define la primera mitad del siglo XX, supuso una ruptura con la arquitectura clásica, creando un nuevo estilo arquitectónico; el pensamiento, conforme expresa De La Rosa, (2012, p.42) “la forma sigue a la función” de Henri Sullivan, se convierte en el eje central de esta corriente. Esto supone el nacimiento de una nueva forma de hacer arquitectura, siendo posible definirlo como un movimiento que busca soluciones siempre distintas, actuando así de manera diferente a otros estilos o corrientes que ofrecían soluciones ya pensadas, utilizando nuevos materiales como el vidrio, el acero, el hierro y el hormigón armado; que proporcionaban la capacidad de nuevas formas de proyectar en arquitectura. Se puede definir también, como el conjunto de tendencias vanguardista que surgieron entre 1920 y 1939. En el primer cuarto del siglo XX, luego de un periodo de revoluciones, conflictos políticos, sociales y la Gran Guerra, hubo también una revolución en el pensamiento de las artes y la arquitectura, “salen a la luz figuras como Le Corbusier, Walter Gropius y Mies van der Rohe, cuya teoría y práctica buscó (…) la solución para los problemas que enfrentaban las grandes ciudades europeas, había que dar respuesta a necesidades como vivienda, trabajo, producción de energía, transporte, estudio y ocio (…)” (Paredes, 2014, p.22). Pero las ideas y postulados que servirían de insignia de esta Nueva Arquitectura, que promulgaba el Movimiento Moderno, fueron los difundidos por el arquitecto Le Corbusier. En el caso de Latinoamérica, Ramón Gutiérrez (1985, citado en Fernández & Palomino, 2017) indica que más que construir una arquitectura adecuada a la época el objetivo era encontrar un estilo latinoamericano, adecuado al lugar, que lograra sobreponerse a los estilos europeos que carecían de consideración hacia el pasado y las características de América Latina. México fue uno de los impulsores de esta tendencia moderna muy propia del contexto latinoamericano. Las numerosas edificaciones ejecutadas demuestran la fuerza alcanzada por los objetivos sociales contenidos en los temas de la iniciativa estatal: habitación, escuelas, hospitales y edificios públicos. En Brasil este espíritu abierto y reflexivo, se había conocido durante las realizaciones de estilos modernos y la construcción de muchas obras importantes, aun así, cuando las ideas de Le Corbusier eran adaptadas con moderación, pues podía ser una moda pasajera, capaz de parecer más tarde tan ridícula, extravagante e intolerable como el Art Nouveau en 1900 (Bruand, 1997; Segre, 1991).
RkJQdWJsaXNoZXIy Mjc5NTQw