Universidad Católica Boliviana "San Pablo"
70 CAPÍTULO VI IDENTIFICACION DEL SECTOR ESTUDIO 6.1. EL AGUA Y EL SUELO Todos los elementos minerales esenciales están en el agua hasta cierto nivel. Ocasionalmente, el agua contiene elementos en concentraciones tóxicas. El mejor ejemplo es el efecto devastador de las tóxicosis por el flúor (F) en los humanos y los animales de regiones de flúorosis endémica del mundo. Sin darse cuenta, los rumiantes en pastoreo pueden consumir grandes cantidades de suelo como consecuencia natural del pastoreo. El consumo deliberado del suelo (Geofagia), por otro lado, es clasificado como una clase de “pica”, la cual es definida como la masticación de objetos y el consumo de materiales por el animal no considerado como alimentos naturales. El consumo directo de grandes cantidades de suelo muchas veces es una indicación de una deficiencia mineral. En algunos casos, los rumiantes en pastoreo puede que consuma tierra y esto puede llegar a representar hasta un 20% de la materia seca consumida. El consumo elevado de suelo de forma indirecta (por contaminación del forraje) es favorecido cuando el suelo tiene una estructura pobre, mal drenaje, alta capacidad de carga y alta población de lombrices, y durante los meses de bajo crecimiento de pasto. En Nueva Zelanda, la ingestión anual del suelo alcanza 75 kg., en las ovejas y 600 kg. En las vacas lecheras. La ingestión de suelo directa o indirecta, puede resultar en consumos elevados de Cobalto (Co) y Yodo (I) ya que los suelos contienen mayores
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